De verdad que fue un momento de bendición y rompimiento espiritual, es un llamado para levantarnos y unirnos a un gran batallón de mujeres guerreras que buscan establecer el Reino de Dios.
También me llamo la atención que la pastora está haciendo esto desde mucho antes de la pandemia pero después se tuvieron que reunir de manera online y allí se unieron de muchos países del mundo, y este ministerio las llaman la PRECIOSAS DE DIOS